Son vitales para la alimentación y la biodiversidad. Tienen una función imprescindible para el equilibrio en la naturaleza.
Ahora pueden "detectar" el COVID 19. Sin embargo, están disminuyendo su presencia en el planeta. ¿Cómo podemos protegerlas?
La agricultura ecológica es una de las herramientas para ello.
Desde hace varios años, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) celebra cada 20 de Mayo el Día Mundial de las Abejas.
Este organismo decidió crear este día para resaltar la importancia de los polinizadores, su gran contribución al desarrollo sostenible y dar visibilidad a las amenazas a las que se enfrentan. Y es que, según numerosos estudios, las poblaciones de abejas están disminuyendo día a día.
De hecho, según Greenpeace, en Europa, el 37% de las poblaciones de abejas está en declive. La organización defiende que estos animales merecen protección incluso desde un punto de vista puramente económico: el 75% de los alimentos que consumimos dependen de la polinización y se ha calculado que el valor económico de la labor de polinización de las abejas y otros polinizadores para la agricultura es de unos 265.000 millones de euros anuales en todo el mundo (22.000 millones de euros para Europa y en torno a los 2.400 millones de euros para España).
Ante esta idea de protección, los expertos han analizado la situación y detectado varios factores como causas del deterioro de la situación de las abejas. Nos hablan de la pérdida de hábitats para estos animales, de la presencia de especies invasoras, del cambio climático y, sobre todo, del uso de plaguicidas y pesticidas.
De este modo, cuando son preguntados por posibles soluciones, todos coinciden en señalar a la agricultura ecológica como solución. En este sentido, especialistas del Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF) y de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) sostienen que las poblaciones de abejas están disminuyendo y que los pesticidas, como los neonicotinoides, son una causa directa, lo que hace prioritario promover la agricultura ecológica y sostenible.
La agricultura ecológica protege y apoya la salud de las abejas de dos formas. Por un lado, hace que la exposición de las abejas a los productos químicos sea menor y, por otro, contribuye a la protección del hábitat nativo de la abeja y su biodiversidad. En definitiva, la agricultura ecológica garantiza una producción sana y sostenible de alimentos, que protege el suelo, el agua y el clima, promueve la biodiversidad y no contamina el medioambiente con productos químicos.
Nota: El 20 de mayo coincide con el aniversario del nacimiento de Anton Jan?a que, en el siglo XVIII, fue pionero de la apicultura moderna en su Eslovenia natal. Jan?a elogiaba lo buenas trabajadoras que son las abejas y la poca supervisión que necesitan de su trabajo.